martes, 25 de setiembre de 2007

La magia está en los detalles

Desde lo más simple hasta lo más complejo, desde una sonrisa hasta un lindo objeto, todo radica en los detalles. Así como el amor, guardando sus distancias, los detalles son los que nos mueven y nos hacen seguir. No importa el tamaño, el precio, lo que importa es su valor y no el monetario, sino su valor sentimental, la manera como se entrega, la calidez con que se otorga, los momentos, los tiempos y sumado a ello, la calidad de tiempo.

Somos inmensamente ricos, pero no nos damos cuenta. Tenemos todo para dar pero no lo aprovechamos. El detalle es muy significativo para cualquier persona, sobre todo para aquella o aquellas personas a quienes amamos. Basta un hola, un cómo estás?, una llamada, un abrazo, un presente, una sonrisa, una flor, un beso, una carta, una palabra, todo es válido para mantener viva la llama, para seguir encendiendo esa fogata, para que no se extinga.

Muchos suelen esperar fechas para darlos, obligados a darlos, otros sólo recuerdan por esas fechas y lo hacen de corazón; hay otro grupo de personas que siempre tienen pequeños detalles pero que son grandes detalles día a día, y son pocos o pocas las personas que realmente los valoran. Un día no basta con saberlo, es necesaria toda la vida para hacerlo sentir. La memoria no es frágil, sino que el corazón es vulnerable y siempre necesita de una tierna caricia.

La magia está en los detalles que demos, porque ellos son muestra de lo que somos, sino, pereceremos en el intento, la llama se apagará sin necesidad de llamar a algún bombero. Todo termina por morirse si no es regado, todo termina por olvidarse cuando no se es recordado. Lo que no se siembra, no florece.
La magia está en nuestras manos, en nuestros corazones, sólo saquémosle el máximo brillo, tenemos un diamante en bruto por pulir día a día. Hagámoslo.

Seamos esa magia, sembremos, no dejemos de regar. El amor es como las flores, se llega a marchitar por falta de cariño y afecto, por falta de detalles que harían de este mundo, un mundo más llevadero, más simple y menos complejo. El ayer ya fue, el hoy está terminando, nos queda el mañana, pero que puede ser del mañana si hoy no empezamos? Todo comienzo es bueno. suerte en tus batallas.

Joy

martes, 18 de setiembre de 2007

Escalones de nuestra vida

A veces me pregunto: ¿Cuántos escalones tiene nuestra vida? ¿Acaso siempre subimos y tan sólo tropezamos pero caminamos peldaño a peldaño? o ¿Cada vez que avanzamos uno retrocedemos dos o más?
Se dice que cuando cometemos error tras error, es que avanzamos un escalón y retrocedemos dos. Yo creo que no. Yo creo que siempre, siempre avanzamos, pues la escalera de nuestra vida es larga y no sabremos nunca de cuantos escalones está formada. Lo único que sabemos es que nuestra vida, posee más escalones que cualquier simple escalera que conocemos.

Cada hora, día, semana, mes, año que pasa, vamos caminando los escalones. No retrocedemos, sólo avanzamos, sino que hay momentos en que ese subir, se hace un poco lento pero seguro. Tropezamos? Es cierto, pero no nos movemos de el, ya que el tiempo pasa y nadie lo detiene, sólo en nuestras famosas y acogedoras cajitas a la que llamamos recuerdos, buenos o malos pero allí están y de todos ellos nos toca aprender.

Ahora bien. Cada uno de nosotros tiene un numero de escalones predestinado por Dios, nosotros lo que hacemos es escribir día a día algo en el. Es en ello en lo que nos diferenciamos y es en ello en donde radica una diferencia de nuestras vidas, para uno es más corta y para otros más larga, pero avanzamos aunque nos parezca todo lo contrario. Escalón tras escalón, vamos hallando el tan ansiado sueño o los sueños y metas que tengamos.

De esta manera es que debemos lograr entender y hacer que nuestra vida sea más placentera, tranquila, segura y duradera. Dando cada día lo mejor de nosotros mismos, dando sin esperar recibir porque es bien sabido que no podemos esperar que todos sean como uno es y no podemos pretender cambiarlo. Sí señores, llamémoslo Tolerancia, no lo olviden, Tolerancia, llena de paciencia y buen humor.

Somos diferentes señores, iguales porque somos hombres y mujeres; diferentes porque cada uno tiene su propia vida y su propio ciclo de vida, pero iguales porque tenemos las mismas capacidades en todos los aspectos, relevantes o no, todos somos hijos de un mismo padre, creyentes de miles de cosas, pero seres humanos reales.
Sigamos caminando y pisando fuerte en cada escalón, en cada paso que demos. De nosotros depende la calidad de vida que nos demos y que demos a los demás. No importa si estamos escalones más arriba o más abajo, a diferencia de otros, lo importante es vivir lo que nos toca vivir.

Joy

sábado, 1 de setiembre de 2007

Setiembre, ....

Setiembre, el mes donde el invierno muere y donde nace la primavera. El mes donde las hojas secas ya no están y donde los nuevos frutos vuelven a germinar. Todo nace, todo crece, no será el mes del amor, pero dentro de el, hay muchas cosas más por descubrir.
Un nuevo mes que nos depara nuevas, gratas y no tan gratas sorpresas, un mes donde la soledad nos puede invadir, donde los amigos - viejos y nuevos - pueden volver a aparecer, pueden irse o pueden jamás nunca volver, un mes en donde una vez más nuestra principal agenda - la memoria - nos tiene varias cosas señaladas de antemano, otras por apuntar y otras que jamás se escribirán.

Un día de sol o de garúa de junio, donde te pueden besar las dos mejillas, donde cae el ocaso y llega el mar hasta sus orillas, todo escrito o no, todo nos lleva a la sola razón de que mejor es vivir, quizás pensando que estamos solos o no, pero seguir viviendo dándonos la oportunidad que nos merecemos. Setiembre, no es uno de los meses más largos, pero sí es uno de los que uno se demora más en escribir. Nada cambia, sólo se transforma, todo nos parece vivido pero no tan conocido, un días más o un día menos, todo es la nada y la nada puede ser todo.

Setiembre sin ti, sin lluvia, sin sol, con ellos o no, a una ráfaga, a unas horas, un día, unos meses, todo llega, en el momento menos esperado. El tiempo pasa tan rápido ante nosotros y no nos damos cuenta. Ya estamos viviendo el noveno mes del año, me pregunto: lo viviremos bien dentro de lo posible? realmente lo viviremos o sólo pasaremos por el? Podría ser... yo sin setiembre, ya que muchos viven por vivir, pero no, procuremos vivirlo, sintiendo en cada instante la sensación maravillosa de que hemos dejado huella al andar y que lo nuestro no fue un simple caminar.

A nosotros nos pertenece nuestra historia, en nuestras manos está la pluma que hemos de mover para reescribirla, que esta no se quede sólo en el papel sino que sea real, verdadera y sencilla. Lo más simple nos quita la complejidad y lo más natural es amar y dejarnos llevar.
Todos estamos aqui por algo, descubramos ese algo y veremos que la magia está en los detalles, las señales están ahí, frente a nuestros ojos. Miremos con los ojos del alma y escuchemos con los oídos del corazón. Recuérdalo.

Joy